¡Hola RQ!
Últimamente veo bebés & niños en toda parte; en la calle, en mi celular, en las películas, everywhere y me agrada.
Es más, disfruto mucho conversar e interactuar con ellos; me entretienen, me ponen en modo presente, aprendo de su simplicidad, de su sinceridad y de cómo ven su mundo que inventan cada día y eso me da vida.
¡Estoy enamorada…un poco más de la vida!
Tengo muchas amigas ya con hijos y la verdad que las admiro tanto por su valentía y compromiso inquebrantable.
Es una gran responsabilidad traer a un niño al mundo, porque un niño implica un nuevo nivel de consciencia y responsabilidad.
Y para ser sinceros sin tanto romance ni adorno, es una tarea física y anímica nivel Sensei, no solo para quien cuida del bebé, sino para la relación de pareja.
No hay atajos ni vuelta atrás; es tu tiempo, es tu trabajo emocional, es tu confianza, son tus recursos tangibles e intangibles. ¡Y en equipo!
Por eso y por todo lo que implica, tengo la certeza de que es un rol admirable, es una manera de ser increíble, tanto que solo puede experimentarse siéndolo.
¡No hay otra manera!
Además si ser tía se siente a otro nivel, no me imagino la magnitud de ser mamá.
¡Siendo Ti@!
Ahora que soy tía, me hace reflexionar sobre el amor que se siente tan diferente a los demás, porque literal no esperas nada, solo te nace entregar, compartir, compartir-te, desde cada célula y rincón de tu cuerpo.
Es un amor muy puro, donde todo es muy genuino; en total libertad, sin pretensiones o recompensas.
No hay cursos, ni se estudia para ser, tampoco reconocimientos, menos exigencias por cumplir.
¡Es una relación que se crea a la imaginación, desde la nada hasta lo inconcebible; lo que no sabes que no sabes!
Yo la verdad, que no había experimentado un sentimiento así y creo que eso es un verdadero amor, lo demás es apego.
Ahora es que comprendo ese amor que he recibido de parte de mis tíos y de mi tía especialmente porque siempre me pregunté:
¿Por qué tanta preocupación, tanta atención y afecto? ¿A son de qué?
...¿Y si todas las lágrimas fueran purpurina?
En estos días que estaba en una entrevista me preguntaron si era mamá y yo respondí la verdad ¡No!. Pero esta vez fue diferente, porque fue un no con posibilidad.
La verdad hoy en día no lo veo como un check list...lo veo más como un ahora no gracias, pero después podría ser.
Sin embargo, de lo que sí tengo una certeza y algo que ha aflorado en mí, es el sentimiento de responsabilidad e ímpetu para crear con compromiso un contexto de posibilidad para la niñez.
Me imagino un lugar mágico, donde ellos puedan crear desde la libertad, a sus términos y espontaneidad, su propia narrativa.
Donde se sientan libres, plenos y reconozcan su grandeza y el que están aquí para dejar un legado de impacto en la sociedad de la manera que lo elijan.
Que sea como un santuario que les permita expresarse, que sea su espacio favorito, su rincón lleno de escritura, manualidades, algo de estoicismo, también de ser equipo con otro y por supuesto mucho running.
¡El guión no es suyo para leer, es de ellos para crear!
Soy de las que cree que todo es incierto y por lo tanto todo es posible; hoy mi prioridad es disfrutar y agradecer ese amor chiquito y tan lindo, que llegó para quedarse y expandirnos.
Y desde ese sentimiento, ser un puente de posibilidad para que los niños recuerden que vinieron al mundo a ser artistas, a crear.
Que sepan y experimenten que pueden elegir lo que sea que los llene y los conecte con el presente.
Escribir, diseñar, construir, programar, curar, enseñar correr. Whatever!
Que sepan también que la vida no es perfecta, pero que vale la pena cada segundo que invierten en eso que aman.
Porque es ahí donde conectan con el presente y la vida fluye en amor, certeza y claridad.
Al final sabrán que el puro éxtasis de crear algo que antes no estaba, algo que es tan cierto, tan único, tan natural, que no les quedará más remedio que hacerlo realidad cueste lo que cueste.
¡Todo es arte, si se hace por sí mismo!
Imagínate un espacio así:
Donde sueñen como locos.
Donde corran, sin frenos.
Donde creen amistades increíbles.
Donde reemplacen los de pronto por los POSIBLEMENTE.
¿Qué tal sería?...
¡MÁGICOOO!
